El Parlamento Europeo actuará de vigilante del futuro Puerto Seguro

En un proceso puesto en marcha por el comisionado Jourová, el Comité de Libertades Civiles --encabezado por Chair Claude Moraes-- vaticinó que el PE actuaría de “perro guardián” para la garantizar a los ciudadanos de la UE la posibilidad de establecer un Puerto de datos Seguro. En este sentido, miembros del PE también expresaron su preocupación por algunas pretensiones a la hora de limitar la recopilación de datos, subrayando la necesidad de asegurar la existencia de un mecanismo independiente que asegure el direccionamiento de las quejas individuales de los ciudadanos europeos directamente a las instancias judiciales correspondientes.

“Como continuación a las conversaciones que han tenido lugar con el comisario Jourová, si bien aplaudo los avances logrados por la comisión para renegociar el acuerdo de Puerto Seguro, por otro lado estoy profundamente preocupado por el verdadero valor que dichas propuestas procedentes del defensor de los derechos de los ciudadanos europeos van a tener en procesos regulados por los poderes judiciales”, ha afirmado Moraes.

La Comisión Europea ha puesto en conocimiento de sus miembros algunas de las propuestas, incluyendo los planteamientos del gobierno norteamericano en la creación de la figura de un defensor para los europeos dentro del propio Departamento de Estado. No obstante, un número de preguntas de gran calado permanecen en el aire antes de alcanzar las condiciones que permitan la creación de una autoridad independiente en cuestiones de protección de datos, tal y como estipula la Carta de derechos fundamentales  y el Artículo 16 del Tratado de la UE. También resulta de gran transcendencia que el PE avance en sus conversaciones con los miembros de la Comisión Europea, en vistas a obtener nuevos progresos de cara a un futuro acuerdo.

El Parlamento Europeo ha jugado un rol fundamental en tirar adelante la creación de un Puerto Seguro; un espacio que ha de ser realmente “seguro”, desde el principio. También, desde el minuto “cero”, la organización ha querido advertir de los defectos que todavía presenta el  futuro acuerdo.