Facebook intentó que los hospitales compartieran datos de pacientes

Los 2000 millones de usuarios de Facebook de todo el mundo van a recibir un aviso de protección de su información vinculado a las aplicaciones que se han aprovechado de la información compartida. La decisión se lleva a cabo coincidiendo con las declaraciones prestadas por el propio CEO de la red social, Mark Zuckerberg, tras testificar en una audiencia en el Senado de los Estados Unidos en relación al escándalo de Cambridge Analytica. Pronto lo hará en la Cámara de Representantes de Estados Unidos. Zuckerberg ha admitido que no hicieron lo suficiente para evitar que estas herramientas se usen también para hacer daño. En concreto, sus palabras han sido “creé Facebook, lo administro y soy responsable de lo que sucede en la red” afirmó el directivo, comprometiéndose a evitar que casos como los de CA se vuelvan a repetir.

También ha salido a la luz la información de que Facebook habría estado hablando secretamente con hospitales sobre el posible intercambio de información de pacientes con la propia red. La propia CNBC informaba del asunto indicando que el grupo de proyectos experimentales Building 8 de Facebook ha estado tratando de lograr que los principales hospitales de Estados Unidos compartieran datos de pacientes anónimos. Desde la red social afirman que los datos habrían sido utilizados para investigaciones realizadas por la comunidad médica. Con toda la repercusión mediática que ha causado el escándalo de Cambridge Analytica, Facebook ha optado por detener el proyecto. Esta fase de planificación, según la CNBC, incluye conversaciones con organizaciones de salud como la Standford Medical School y el American College of Cardiology el pasado mes de marzo.

Al mismo tiempo, siguen produciéndose noticias sobre personalidades y conocidos que deciden abandonar el uso de la red social. El último en unirse es el cofundador de Apple, Steve Wozniak, que recientemente afirmaba estar en el proceso de abandonar Facebook, con el movimiento #deleteFacebook. “Me ha traído más cosas negativas que positivas y todavía puedo lidiar con correos electrónicos y mensajes de texto de la vieja escuela”, puntualizaba el propio Woz, como cariñosamente se le conoce.