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Guía práctica: adiós al 'roaming' para siempre

A partir hoy se puede utilizar el teléfono móvil tanto para realizar llamadas como para conectarse a Internet en cualquier país de la Unión Europea sin tener que pagar más.

Roaming

Y por fin llegó el día. La itinerancia móvil, lo que conocemos como roaming, deja de existir hoy para siempre para que los usuarios puedan utilizar el teléfono móvil en cualquier país de la Unión Europea sin tener que abonar un sobrecoste. Los clientes pagarán, eso sí, lo mismo que paguen en su país de origen con la tarifa que tengan contratada.

Se trata de una petición histórica de los usuarios de telefonía móvil puesto que los sobrecostes ponían trabas a la libre movilidad de los usuarios. Aun así, este cambio no es tan sencillo como parece, ya que conlleva una serie de implicaciones y limitaciones para evitar el mal uso por parte de los usuarios que quieran beneficiarse ilícitamente del fin del roaming.

La Unión Europea ha luchado por este beneficio durante más de 10 años pero las operadoras de telefonía móvil se oponían a dejar de cobrar a los usuarios por utilizar sus servicios fuera del territorio nacional. De hecho, ha habido hasta tres ocasiones en las que se fijó fecha para poner fin al roaming pero siempre se aplazaba.  

La Comisión Europea ha establecido el precio de 3,2 céntimos por minuto de voz y 7,7 euros por Gb de datos cuando se use el teléfono en un país europeo distinto al que se contrató pero serán las operadoras quienes –a partir de hoy- asuman ese cargo y no repercuta en la factura del cliente. Este techo tarifario será revisado periódicamente, cada dos años, por la Comisión Europea para adaptarlo al impacto del roaming sobre el mercado.

Países involucrados

El roaming es historia en los 28 países que conforman la Unión Europea. Es decir, cualquier ciudadano de la UE podrá utilizar su línea móvil de contrato para realizar llamadas o navegar por Internet libremente sin soportar sobrecostes en los siguientes países: Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chipre, República Checa, Croacia, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido, Rumanía y Suecia.

Pero, ¿qué ocurre con el fin del roaming en Reino Unido tras el Brexit? La postura de la Unión Europea y las operadoras británicas sobre este tema es claro. A día de hoy, Reino Unido elimina el roaming como el resto de países europeos. De hecho, el organismo supranacional ha manifestado su deseo de que Reino Unido pudiera seguir siendo zona libre de roaming para sus ciudadanos incluso si el país abandona definitivamente la UE, pero todo dependerá de las conversaciones y acuerdos a los que se llegue en los próximos meses.

Excepciones

La Comisión Europea ha previsto una serie de situaciones en las que las operadoras podrán cobrar para evitar prácticas abusivas de los usuarios. El fin del roaming está pensado para beneficiar la libre movilidad de los usuarios en periodos cortos –viajes de trabajo o vacaciones, por ejemplo- pero no para el uso continuado en el tiempo de la red de telefonía de una operadora extranjera, lo que se denomina “roaming permanente”.

Por eso se ha establecido un “periodo ventana” de cuatro meses. En los casos en los que se detecte que en los últimos cuatro meses el usuario ha utilizado más su móvil en el extranjero que en el país de origen, su operadora podrá pedirle explicaciones y solicitarle que demuestre que reside en el país o que tiene vínculos estables con ese Estado miembro. El cliente tendrá un plazo de 14 días para ofrecer una respuesta a su compañía y justificar que se encuentra en otro país por una causa razonable, así como un erasmus.

En estos casos, aunque se recomienda optar por una línea de teléfono local durante ese periodo, podría considerarse la situación como temporal y no incurrir en ningún tipo de penalización por parte de la operadora, sobre todo si se señala una fecha próxima de fin de la estancia. Sin embargo, en los casos en los que el usuario no pueda justificarlo, la operadora deberá iniciar un procedimiento de reclamación y podrá imponerle que sea él quien pague el precio mínimo establecido por la Comisión Europea. Si el cliente no está de acuerdo, podrá recurrir a la autoridad reguladora nacional, que se encargará de resolver la situación entre ambos.

En definitiva, sí que se puede contratar una línea de telefonía móvil en otro país y beneficiarse del fin del roaming; lo que está limitado es que el uso mayoritario de la línea se realice en el país que se contrató. Lo que tampoco se puede hacer es contratar una tarifa más económica en otro país y utilizarla mayoritariamente en España.

Otros datos de interés

Dejando esto a un lado, es importante saber que el fin del roaming afecta a todas las líneas móviles de contrato, no a las de prepago. Cada operadora es libre de proporcionar a sus clientes precios más ventajosos para utilizar su móvil de prepago en el extranjero e incluso algunas han anunciado que eliminan este sobrecoste también para sus clientes de prepago.

Respecto a las tarifas planas, las operadoras podrán imponer también restricciones en el caso de las tarifas más competitivas, que ofrecen una cantidad ilimitada de datos para navegar a través de Internet, y limitar su uso mayoritario en el mercado nacional. Esto, a día de hoy, no aplica en España, puesto que ninguna operadora ofrece tarifas planas de datos en este momento, pero podrían hacerlo en el futuro.

Asimismo, no es necesario darse de alta. Por defecto, todos los clientes de telefonía móvil de contrato de cualquier país miembro se beneficiarán del fin del roaming a partir de hoy.

Las llamadas a otro país, perteneciente o no a la UE, desde el propio país no se consideran itinerancia, por lo que no se aplican las normas sobre el roaming con tarifa nacional. Hay que tener en cuenta que los precios de estas llamadas no están regulados y pueden ser elevados. Los precios del roaming (especialmente de los datos) fuera de la UE pueden ser muy caros. Para evitar facturas excesivas, consulta las tarifas antes de viajar.

Cuando se viaje por barco o avión dentro de la UE, se puede utilizar el roaming sin recargos siempre que estés conectado a una red de telefonía móvil terrestre. Si los servicios móviles se prestan por satélite, no se aplica el roaming sin recargos y se deberá abonar el coste de los servicios de roaming no reglamentado (sin límites de precios).

Denuncia Facua

Pero según FACUA, el ahorro global que supondrá para los usuarios el fin del roaming en la UE será de 0 euros. La asociación denuncia cómo las grandes operadoras llevan meses incrementando los precios de distintos servicios saltándose, así, la legislación de defensa de los consumidores ante la absoluta pasividad de las autoridades competentes.

Hace unos días, la Comisión Europea avisó a los Estados miembro de que vigilaría cualquier tendencia a incrementar los precios nacionales de servicios de telefonía móvil tras la abolición de los sobrecostes por utilizar el móvil en itinerancia. Lo cierto, denuncia FACUA, es que en España las subidas llevan bastante tiempo produciéndose y nadie hace nada.  

Los incrementos en las tarifas nacionales no sólo compensan la pérdida de ingresos por el fin del roaming en la UE, sino que reportarán a las telecos un aumento en sus márgenes de beneficios, denuncia FACUA, que reclama medidas a las autoridades competentes.

La asociación ha interpuesto numerosas denuncias contra las operadoras pero, hasta la fecha, ninguna autoridad autonómica de protección al consumidor ha comunicado a FACUA la apertura de expedientes sancionadores por estas prácticas fraudulentas.



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Fernando Rubio Román, CTO de Microsoft España. TECNOLOGÍA
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