El hogar inteligente se especializa en el cuidado a personas mayores

El desarrollo de hogares inteligentes es uno de los principales campos de trabajo en la conectividad y el IoT, especialmente en lo que se refiere a su contacto directo con consumidores, aunque el público mayoritario al que se dirigen estos dispositivos podría estar experimentando una evolución. Así lo apuntan desde CB Insights en su estudio sobre las tendencias para 2019 que están afectando a la tecnología. 

De acuerdo a los expertos de la firma de investigación, el mercado de los dispositivos para el hogar registrará una importante integración con el de tecnología para cuidados domiciliarios, destinados sobre todo a personas de la franja de mayor edad. En los últimos doce meses se ha producido un incremento del registro de patentes de dispositivos de este tipo, que permiten el control de los ciudadanos. 

Entre las herramientas que respaldan este giro de mercado hay varios ejemplos. En enero del pasado año, Google patentó unos sensores ópticos siempre activos para situar en espacios como baños, que registran datos de funciones cardiovasculares a través del seguimiento del cambio de tonalidad de la piel. Amazon, por su parte, se aseguraba una patente para una herramienta que detecta condiciones extraordinarias en la voz; tanto a nivel de afonías o toses como, incluso, de cambio de estado emocional. Esta información se puede programar para alertar a familiares o especialistas, en caso de necesitarlo. Se trata de realizar un seguimiento de personas que estén en situación de vulnerabilidad, para asegurarse su bienestar o una rápida respuesta en caso de que haya problemas. 

El hogar inteligente ya no es únicamente el que permite al usuario asegurar los cierres, cambiar la temperatura en remoto o poner un hilo musical. Sus posibilidades se multiplican en 2019, y a medida que las generaciones capacitadas tecnológicamente van cumpliendo años, se gana un nuevo mercado de casos de uso.