Estados Unidos, Europa y un objetivo común: las ‘Big Tech’ deben compartir el coste de red
Si hace unos meses la responsable Digital de la UE instaba a los gigantes tecnológicos a compartir de manera “justa” los costes de las redes de telecomunicaciones, ahora se suma a la reivindicación la FCC.
- ¿Deberían los gigantes tecnológicos compartir los costes de la red de telecomunicaciones?
- España, Francia e Italia piden a Bruselas que las ‘big tech’ financien las redes
- Nuevas reglas en el tablero europeo: la normativa para las 'Big Tech', en vigor en 2023
- Bruselas presenta una ley de datos proteccionista frente a las 'big tech' estadounidenses

Estados Unidos se alinea con Europa por un objetivo común: las grandes compañías tecnológicas deben pagar las redes de telecomunicaciones. La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por sus siglas en inglés), regulador estadounidense, baraja la posibilidad de que las denominadas Big Tech como Google, Meta, Amazon o Netflix financien el aumento de capacidad de las redes, cuyo tráfico crece exponencialmente por los vídeos, las redes sociales y los juegos. Así, según un informe firmado por el organismo y enviado al Congreso, se pone de manifiesto que “las empresas tecnológicas se benefician significativamente de Internet sin contribuir al mantenimiento de la infraestructura que lo soporta”, por lo que ha llegado el momento de tomar cartas en el asunto.
Partiendo de este contexto, fue el comisionado de la FCC, Brendan Carr, quien expuso que el Fondo de Servicio Universal (FSU) representa la única fuente de financiación para muchos de los programas de conectividad universal de la institución. Sin embargo, aseguró, “este mecanismo de financiación está atrapado en una espiral mortal que depende de un cargo a las facturas mensuales de los operadores de telefonía”. Hasta la fecha el fondo había funcionado gracias a “un mecanismo que tenía sentido en los días de acceso telefónico y módems chirriantes de la década de 1990, cuando era mucho más probable que las personas tuvieran una tarjeta de llamadas de larga distancia en su cartera que una dirección de correo electrónico a su nombre”. Por ello, Carr argumentó que se debe modificar la base de contribuciones del Fondo de Servicio Universal para exigir a las Big Tech que comiencen a aportar. “Esto permitiría una distribución más justa y equitativa de las cotizaciones en el FSU, sin perjudicar a los consumidores”.
Un discurso que se replica
Las declaraciones ofrecidas por Carr recuerdan a las pronunciadas por la responsable Digital de la Unión Europea (UE), Margrethe Vestager, meses atrás en un discurso que se repite. Creo que hay un tema que debemos considerar con mucha atención, y es el tema de la contribución justa a las redes de telecomunicaciones", dijo Vestager en una conferencia de prensa. De esta forma exponía sobre la mesa lo que entendía como una nueva forma de financiación más equitativa. A este respecto la mandataria europea aseveraba que “vemos que hay jugadores que generan mucho tráfico que contribuye a la habilitación de su negocio pero que no han estado aportando realmente a la consolidación del citado tráfico”. Incidía en que estas empresas “no han contribuido a permitir las inversiones en el despliegue de la conectividad". Ante este escenario, “estamos en proceso de comprender a fondo cómo podría habilitarse", dijo Vestager, añadiendo que estaba estudiando cómo evoluciona el tráfico de datos a lo largo del tiempo y qué medidas se pueden tomar para solventar la situación actual.