GlobalFoundries demanda a IBM por cesión ilegal de secretos comerciales a la japonesa Rapidus

El fabricante de semiconductores, GlobalFoundries, ha demandado formalmente a IBM por, dicen, compartir ilegalmente propiedad intelectual confidencial y secretos comerciales corporativos con terceras partes. Esta es la segunda vez que se enfrentan en los tribunales desde que IBM adquiriera sus plantas de semiconductores en 2015. En esta ocasión, la compañía, con sede en Nueva York, ha interpuesto una demanda al considerar que IBM había compartido propiedad intelectual y secretos comerciales con Rapidus, un nuevo consorcio japonés respaldado por el Estado con el que IBM está trabajando para desarrollar y producir chips de dos nanómetros de última generación.

Siguiendo esta misma estela, GlobalFoundries ha apuntado que IBM también había divulgado ilegalmente y utilizado indebidamente su propiedad intelectual con Intel. Algo que se habría producido después de que IBM anunciase en 2021 que colaboraría con Intel en la tecnología de chips de próxima generación. "IBM está recibiendo injustamente cientos de millones de dólares en ingresos por licencias y otros beneficios", aseveró GlobalFoundries comunicado mediante.

Dimes y diretes

La respuesta por parte de IBM no se ha hecho esperar. La conocida como Big Blue ha asegurado en declaraciones para Reuters que “GlobalFoundries presentó esta demanda sin fundamento después de que un tribunal rechazara el intento de la empresa de desestimar las legítimas reclamaciones de IBM por fraude e incumplimiento de contrato. Sus alegaciones son totalmente infundadas y confiamos en que el tribunal nos dé la razón”. Las otras dos partes salpicadas, es decir, Intel y Rapidus, han coincidido en no hacer declaraciones al respecto.

Requerimientos

La demanda de la discordia recoge que GlobalFoundries e IBM habían desarrollado tecnología en colaboración durante décadas en Albany, Nueva York, y que el derecho exclusivo a licenciar y divulgar la tecnología se vendió a GlobalFoundries en 2015. En este sentido, la acusación solicita daños compensatorios y punitivos, así como una orden judicial contra IBM para que deje de utilizar los secretos comerciales. Asimismo, aseguran que el gigante azul habría estado reclutando ingenieros de GlobalFoundries –esfuerzos que se han redoblado desde que se anunció la alianza con Rapidus en diciembre de 2022-, por lo que reclaman al tribunal que ordene el fin de estas operaciones de reclutamiento.