La 'startup' AyGLOO y Europa Press se unen para combatir las 'fake news' con inteligencia artificial

Hacia finales de este año, las personas consumirán más noticias falsas que verdaderas en Occidente, según un estudio realizado por la consultora Garnet. Las fake news se han transformado en un verdadero problema en la actualidad, sobre todo en momentos de crisis como el actual, donde los bulos sobre la pandemia, la guerra de Ucrania y los procesos electorales se expanden a niveles sin precedentes. En este contexto, la startup española AyGLOO, de la mano con la agencia de noticias Europa Press, están desarrollando un proyecto que ayuda a detectar las fake news utilizando inteligencia artificial explicable (XAI).

El objetivo del proyecto es crear una herramienta de uso fácil para que los periodistas y redactores puedan verificar información que circula en internet, redes sociales y foros. Esto se está haciendo gracias a la inteligencia artificial explicable, que consiste en la utilización de métodos de inteligencia artificial y machine learning que, a diferencia de las técnicas más clásicas de estas tecnologías, explica a los usuarios cómo ha llegado a esas conclusiones. En ese sentido, la herramienta permitirá a los periodistas conocer los motivos de por qué el sistema consideró esa información como falsa o verdadera. 

Ignacio Gutiérrez Peña, fundador y CEO de AyGLOO -startup dedicada a la creación de soluciones XAI-, explicó que “agilizaremos el proceso de la verificación de noticias con la aplicación de técnicas avanzadas de inteligencia artificial y entendimiento de lenguaje natural (NLP), capaces de analizar el texto de la noticia, y avisaremos al redactor o bien de que esa noticia ya ha sido verificada por otro organismo independiente o bien, cuando sea necesario, de que es sospechosa de ser falsa y debe ser verificada por otros medios”. 

Además de contar con las capacidades técnicas de AyGLOO y la experiencia de Europa Press, el proyecto tiene el apoyo financiero del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) y la colaboración de la Universidad Politécnica de Madrid.