La transformación digital, en el centro de la recuperación económica

Ayer, durante la segunda edición del encuentro de Economía Digital organizado por AMETIC, su presidente José Manuel de Riva sostuvo que a pesar de que todo el mundo parece estar convencido de la relevancia de transformación digital, nuestra realidad no lo refleja. “La innovación y la tecnología están en el discurso, pero no están en la realidad cotidiana que nos rodea”, explicó.

En su intervención, como publicaron nuestros compañeros de CIO, dijo que España no está en el lugar que debiera en la omnipresente revolución digital, ni en términos relativos ni en términos absolutos, e instó tanto los poderes públicos como el sector privado tienen que tomar decisiones concretas y a asumir un compromiso real ante esta gran oportunidad.

Pero la jornada inaugural también contó José Manuel Soria, ministro en funciones de Industria, Energía y Turismo; el presidente de la CEOE, Juan Rosell, y Markus J. Beyrer, director general de BusinessEurope.
 
En palabras del titular de Industria, “el empresariado debe de ser consciente que estamos a las puertas de la digitalización de nuestra economía”. El político popular recordó que este es un proceso que se viene abordando hace casi cuatro  años, cuando se publicó la Agenda Digital para España, como marco de referencia para establecer una hoja de ruta en materia de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones  y de administración electrónica. Se establecía la estrategia de España para alcanzar los objetivos de la Agenda Digital para Europa; maximizar el impacto de las políticas públicas en TIC para mejorar la productividad y la competitividad; y transformar y modernizar la economía y sociedad española mediante un uso eficaz e intensivo de las TIC por la ciudadanía, empresas y Administraciones.

Por su parte, Juan Rosell, presidente de CEOE, subrayó que “para los empresarios españoles asumir plenamente la obligación de estar en la economía digital es una necesidad impostergable”

Rosell recordó que la enorme cantidad de avances tecnológicos han modificado la forma de trabajar y de relacionarse en nuestra sociedad, pero que aún queda mucho camino por recorrer. Camino que en el debemos avanzar rápidamente. Claro que las empresas se van enfrentando con los retos que supone la transformación digital, lo que exige un gran esfuerzo por parte de los sectores público y privado, “del que no podemos desviarnos”.

Puso el acento también en que si vamos hacia el mercado único digital, debemos no sólo acelerar nuestros esfuerzos por alcanzar los niveles de digitalización los países más avanzados de nuestro entorno, ya que formamos parte del área europea, también debemos de ser conscientes que estamos ya compitiendo duramente con Estados Unidos y el área Asia-Pacífico, que nos llevan bastante ventaja.

En este camino debemos aceptar que si bien vamos a generar más empleo, también vamos a destruirlo. Por ello, según el presidente de la patronal, tenemos que buscar las nuevas áreas laborales e intensificar nuestra presencia. Es el caso de la industria 4.0. Aunque hemos absorbido mucha tecnología durante estos últimos años, el proceso de transformación digital no se detiene y seguirá evolucionando, con lo que serán muchos los nuevos conceptos tecnológicos que deberemos asumir.

Hizo también una pequeña exposición sobre las pymes y su necesidad de digitalización. En este sentido recordó que en Estados Unidos, por ejemplo, durante el último año las pymes digitalizadas han generado algo más de 500.000 nuevos puestos de trabajo. Este es un sector en el que debemos intensificar los procesos de digitalización, subrayó, ya que está comprobado que pymes digitalizadas son capaces de doblar el porcentaje de exportación de aquellas que no lo son.

Por último, hizo hincapié la relevancia de la ciberseguridad. Si bien es cierto que los sensores recogen miles de millones de datos, no es menos cierto que en lo que a protección respecta debemos extremas las medidas.  

Por su parte,  Markus, J. Beyrer, director general de BusinessEurope, señaló que "la digitalización no es una opción más. Es una necesidad para Europa si queremos volver a la senda de una recuperación sostenida. En 2025, Europa podría  añadir un valor bruto a su industria de 1,25 billones de euros gracias a la digitalización. Pero, sin esta transformación, las pérdidas potenciales pueden ser de hasta 600 millones de euros para el año 2025. Esto es más del 10% de nuestra base industrial. Para ello, Europa debe hacer los movimientos correctos en los datos, el empleo, las habilidades y la infraestructura”.
 
Beyrer, que se lamentó de que sólo el 1,7% de las empresas de la UE que hacen uso de tecnologías digitales avanzadas, aseguró que “la economía digital está en constante y rápida evolución”, por lo que solicita que “cualquier legislación aplicable a la economía digital tenga el suficiente grado de flexibilidad para adaptarse a esta evolución, y que no constituya freno a la innovación y el crecimiento”.

Y a este respecto añadió que “con el fin de aprovechar todas las ventajas de la transformación digital, necesitamos medidas enérgicas a nivel europeo, ya que las acciones nacionales simplemente no son suficientes para aprovechar al máximo las oportunidades que trae consigo la digitalización. Sus deseos pasan por ”evitar la fragmentación y fomentar la creación de centros digitales en todo el continente. Esto requiere una regulación equilibrada, y un cambio en el modelo educativo y en la manera de pensar”.

Concluyó su intervención diciendo que “la transformación digital puede situarse en el centro de la recuperación de Europa, pero esto sólo ocurrirá en un entorno favorable a la innovación”.