Orizon pone la mira en el 'retail' y las eléctricas para seguir creciendo
La española, que ha crecido más del 50% en 2020, alcanzando 1,7 millones de euros en facturación, tiene una fuerte presencia en la banca y el sector asegurador, aunque de cara a 2021 quiere posicionar también su tecnología de detección de errores en infraestructuras tecnológicas en el mundo del 'retail' y la energía.
“No hemos parado de crecer a pesar de la covid”, reconocía Ángel Pineda, CEO y fundador de Orizon, en un encuentro virtual con la prensa en el que hizo balance de la marcha de la compañía en un 2020 especial, marcado por la pandemia; una situación que apenas ha alterado los planes de crecimiento de esta compañía dedicada, con una tecnología propia llamada BOA, a detectar errores en las infraestructuras tecnológicas de grandes empresas, y en cuyo desarrollo ya ha invertido dos millones de euros y al que espera destinar otro medio millón más este ejercicio.
“Cerramos 2020 con una facturación de 1,7 millones de euros, tras experimentar un crecimiento del 51% frente a 2019. En 2021 esperamos seguir creciendo y llegar a los 3 millones de euros, en 2022 alcanzar los 7 millones y en 2023 superar los 10 millones”, según Pineda.
José Manuel Desco, director general de la compañía, subrayó los “excelentes ratios de solvencia y liquidez” de Orizon, que hacen que este año la empresa se esté autofinanciando y no precise buscar capital externo, aunque, añadió, “no renunciamos a una posible ronda de financiación de algún tipo, si ésta surge en el futuro”. Una financiación que, afirma, serviría para impulsar el crecimiento internacional de la empresa. Este año el 20% de la facturación de Orizon provendrá del mercado internacional (ya opera en Colombia y Brasil), aunque el objetivo de Pineda y Desco es que este porcentaje ascienda al 40% en 2023, siendo Latinoamérica y Europa el foco de esta estrategia. Desco tampoco descarta que la compañía pueda ser adquirida por otro jugador en un futuro “si se dan excelentes condiciones”.
En España, la firma aspira a crecer ampliando los sectores en los que está implantada su tecnología, que hoy por hoy son fundamentalmente en el sector de la banca y algo menos en el asegurador (su tecnología gestiona más de 500 millones de procesos de negocio en estos segmentos). “Este 2021 queremos entrar en grandes empresas de retail y de utilities, en especial en las grandes eléctricas (productoras y comercializadoras de energía), de forma que el sector bancario y asegurador solo represente la mitad de nuestro negocio”, según Desco. Ni Pineda ni Desco creen que la concentración de la banca afectará de forma negativa al negocio de Orizon. “Al final es un proceso que requerirá comprar más infraestructura y optimizar, lo que favorece nuestra labor”.
Con una plantilla de 35 personas en 2020 (nació con 16 profesionales en 2019), el equipo de Orizon prevé que la compañía alcance los 100 profesionales en plantilla en 2022.
Inteligencia artificial como motor tecnológico
La solución de Orizon, llamada BOA, permite monitorizar permanentemente el funcionamiento de la tecnología de las grandes corporaciones para detectar y eliminar problemas, lo que, defiende Pineda, mejora el rendimiento, aumenta los tiempos de respuesta de los sistemas un 25% y posibilita conseguir unos ahorros de costes totales de las infraestructuras tecnológica de hasta un 40%.
El equipo de Orizon está trabajando para ampliar la capacidad de automatización de la solución mediante el uso de inteligencia artificial y algoritmos. Su objetivo es elevar hasta en un 50% la detección automática y sin intervención humana de errores durante este año.
