La adopción el 5G en las empresas se retrasa debido al COVID-19

La expansión de la pandemia del coronavirus sigue dejando consecuencias. En este caso se trata de la adopción de 5G por parte de las empresas, una acción que se va a ver retrasada porque el organismo de estándares de 3GPP ha parado la actividad durante al menos dos meses. 

Hablamos del estándar Release 16, el cual ocupa los estántadares de latencia y exige un 99.999% de tiempo de funcionamiento. En un principio estaba previsto que se publicara en marzo pero dadas las circunstancias, se retrasa de momento hasta junio. 

"Considerando que una hora de inactividad de la máquina le cuesta a cada fabricante un promedio de 300.000 dólares, esto subraya la importancia de una alta fiabilidad en la disponibilidad de la red de comunicación", dijo el analista de ABI Research, Leo Gergs. 

Esto va a provocar que las empresas que necesiten una infraestructura de red celular modernizada se verán obligadas a depender de varias combinaciones de otras tecnologías - 4G/LTE, Wi-Fi y Bluetooth - para diferentes casos de uso.

Según Gergs, esta es una solución viable, pero es menos deseable que la de 5G dado el trabajo adicional necesario para asegurar la interoperabilidad entre esos diferentes estándares. También se da el caso e que el 5G por sí mismo podría satisfacer esas necesidades.

También hay que tener en cuenta que la más que posible recesión económica general que se producirá después de la pandemia, podría reducir severamente los presupuestos de TI, dando lugar a que la base de clientes potenciales para la nueva tecnología 5G sea proporcionalmente menor.

Es un punto especialmente crítico para las industrias que podrían realmente utilizar las ventajas del 5G en sus esfuerzos por combatir el coronavirus y su impacto económico, como la agricultura y la medicina. Las opciones precisas de diagnóstico remoto requieren video de alta definición, y el 5G es la red adecuada para proporcionar el ancho de banda necesario. Según apuntó Gergs los sistemas de telesalud ayudaron a combatir el brote de COVID-19 en China, tanto a través de la consulta remota en hospitales improvisados como de la comunicación fuera del sitio con pacientes aislados. Pero hay más campos, como el de la agricultura, donde la tecnología 5G podría proporcionar un grado mucho mayor de automatización y disminuir la dependencia de la mano de obra, que puede ser escasa.