Telefónica, Vodafone y BT se reparten los contratos de telecomunicaciones del Estado

Formalizado el contrato de servicios consolidados de telecomunicaciones de la Administración General del Estado en su Fase II, un documento llamado a definir las organizaciones que se encargarán de dar soporte a las principales entidades y organismos públicos en temas de comunicación entre los años 2020 y 2023. Las empresas que han resultado adjudicatarias son Telefónica, Vodafone y BT, que se han repartido los cuatro lotes principales en los que se dividía la contratación. 

Como se detalla en el pliego de condiciones publicado en enero por la Secretaría General de Administración Digital del Ministerio de Hacienda, el procedimiento busca fijar las organizaciones encargadas de prestar los servicios de comunicaciones (voz y datos, fijos y móviles) e Internet. Se trata de la segunda fase del modelo introducido en 2013, tras un informe de la Comisión para la Reforma de las Administraciones Públicas. Conocida como CORA, instaba a cambiar el sistema tradicional de telecomunicaciones del Gobierno y sus organismos vinculados, que se contrataba de forma separada y con distintos criterios, para mejorar la eficiencia y racionalizar su desempeño.

Esto es: con el objetivo de unificar los sistemas para evitar problemas técnicos y dificultades de gestión, se optó por declarar de contratación centralizada los servicios de telecomunicaciones para crear "una red corporativa única y común". Dada la complicación de esta transformación, la Administración fijó una implementación en distintas fases. La primera entró en vigor hace exactamente cuatro años, el 11 de septiembre de 2015. En la segunda, la que se formaliza ahora, incorpora nuevos departamentos y entidades públicas que se suman a los que ya están participando.

Adjudicatarias del contrato

Esta segunda fase tiene un presupuesto base de licitación de algo más de 239 millones de euros —todas las cantidades están citadas sin impuestos—. Como la primera, divide en cuatro lotes el contrato: datos y telefonía fija, comunicaciones móviles, Internet y red internacional. La formalización oficializada ahora confirma las adjudicaciones cerradas en el último día de julio, que otorgan a Vodafone la parte móvil, a BT la de internacional y telefonía fija, datos e Internet a Telefónica. Todas las adjudicaciones se han basado en el mismo criterio: ser la oferta con mejor relación calidad-precio.

La principal teleco del mercado en España es la mayor beneficiaria en el proceso, con dos lotes valorados en un total de 134,2 millones de euros. 123,11 millones se corresponden con el lote 1, de red corporativa multiservicio de datos y servicio de telefonía fija, al que también optó Vodafone; su oferta fue exlcuida por no superar el umbral mínimo del 50% de la puntuación total máxima de los criterios no evaluables. Una situación similar a la que se vivió en la subasta del lote 3, el de Internet, a la que también concurría Orange y que fue apartada por la misma razón que Vodafone. La oferta de Telefónica de 11,1 millones de euros resultó, así, la elegida. 

En el caso del lote 2, el de comunicaciones móviles, se admitieron propuestas de las tres empresas. La beneficiaria última fue Vodafone, con una adjudicación de 10,3 millones. 

El lote 4, de red internacional, ha ido a parar a la filial española de BT que, con una oferta de 39,9 millones de euros, se ha impuesto a la de Telefónica, próxima a los 44 millones. Habrá que ver cómo encaja esta noticia con los rumores que hablaban de una posible venta del negocio en España de la teleco británica.

Está previsto que todos los contratos de la segunda fase entren en vigor el 1 de marzo de 2020, con un plazo de ejecución de algo más de tres años, hasta el 10 de septiembre de 2023.