El futuro de la educación, a debate

Pocos dudan de que el futuro de la educación es una de las cuestiones más trascendentales de nuestro tiempo. De ahí que se le tenga que prestar la atención que merece. Y eso es lo que se hará desde mañana y hasta el viernes en el Congreso Global Virtual Educa, que se celebrará en formato virtual, y que reunirá a expertos en la materia.

ComputerWorld ha charlado con algunos de ellos para que nos aporten su opinión al respecto del futuro de la educación. Es el caso de Alex Rovira, conferenciante y escritor de BCC Conferenciantes. En su opinión, un evento de estas características “debe enseñar al alumnado virtudes como la longanimidad y la resiliencia, el aprendizaje a través de los errores propios y ajenos, el aprendizaje de hacer del desafío oportunidad, de diferenciar el error del fracaso, de convertir la culpa en responsabilidad, en definitiva, aprender el oficio de vivir. Y en este sentido, que se dialogue y se trabaje en el desarrollo de cuestiones tan vitales como la búsqueda y el encuentro del sentido vital, la salud psicológica y emocional, el arte como vía de expresión creativa y crecimiento personal, así como el desarrollo de habilidades que tengan que ver con el cuidado de la salud propia y de los demás, desde una buena dieta, la disciplina en la práctica del ejercicio diario, el cultivo de la lectura y de la incorporación del hábito del aprendizaje constante y del ejercicio de compartir el conocimiento útil con los demás, entre tantas otras destrezas”. 

El papel de las nuevas tecnologías

Todo ello en un contexto en el que las nuevas tecnologías desempeñarán un papel fundamental. Así lo cree Amparo Alonso, presidenta de AEPIA (Asoc. Española para la Inteligencia Artificial) y Catedrática de C. Computación e Inteligencia Artificial Grupo LIDIA (Laboratorio I+D en Intel, quien cree que “nos ayudan a poder proporcionar una educación más adaptada a las circunstancias de cada persona, al proporcionar más interacción con los profesores y compañeros favorece el trabajo en equipo y sus valores. La comunicación con el profesor suele ser más fluida, a la vez que mejora la autonomía de los alumnos, y favorece el que puedan adquirir competencias en habilidades transversales.  Finalmente, se ha constatado que aumentan la motivación de los estudiantes y que fomentan la creatividad”.

Y un escenario en el que el docente tendrá que evolucionar para adaptarse a él. Pilar Llácer, directora de EAE Business School (Head of Research Center Work of the Future), es de la opinión de que habrá  “menos profesores y más maestros. Su papel fundamental será “enamorar” al alumno en el hábito constante de aprender. Los entornos serán cada vez más inciertos y cambiantes, y lo que nos dará una sociedad mejor, será personas que sepan adaptarse a los cambios, y eso solo se consigue con una formación constante”.

Ya que hablamos de tecnología, un concepto que incidirá en el desarrollo de la educación es el de micronube, que “ha sido bien validado por el sector comercial durante años, y ahora está siendo aprovechado por el sector educativo para hacer frente a estos desafíos”, en opinión de Charles Foley, presidente de Critical Links, quien desarrolla aquel concepto de esta manera: “Una micronube para la educación es un entorno de aprendizaje en la nube autónomo que se aloja en un dispositivo local. Esta micronube local presenta un entorno completo de aprendizaje electrónico (incluidos los contenidos, el plan de estudios y otros recursos) a los estudiantes y profesores incluso cuando la escuela no está conectada a Internet.  Esto es posible porque la micronube almacena en caché localmente todo el plan de estudios y el contenido, y los estudiantes y profesores pueden acceder fácilmente a ella a través del punto de acceso Wifi integrado en la micronube; todo lo que necesitan es un dispositivo con navegador.  Sin embargo, la micronube local está bajo el control de un sistema maestro residente en la nube, a través del cual los administradores determinan qué contenido, plan de estudios y recursos deben estar en las micronubes del sistema escolar.  Esto aporta una gestión pedagógica en tiempo real a escala, ya que los administradores tienen un único portal a través del cual gestionar miles de micronubes. El beneficio para los estudiantes es una educación atractiva y de vanguardia; el beneficio para los educadores es la escala, la simplicidad y la coherencia”.