España mejora en materia de competitividad digital según el IMD
Aunque escala tres posiciones recuperando así su puesto prepandemia, todavía está por debajo de un total de 14 países en la tabla clasificatoria. Una situación que evidencia el trabajo que queda por hacer.
- “Todavía utilizamos la web y la tecnología sin las competencias digitales adecuadas”
- Alcanzar los objetivos digitales europeos de 2030, una oportunidad de 228.000 millones de euros para España
- “España tiene unas infraestructuras digitales fantásticas, sin embargo, nuestro mayor déficit es encontrar gente capacitada para el mundo digital”
- El sector público invierte 121 millones de euros en ciberseguridad en el primer semestre de 2022
A España todavía le queda camino que recorrer si quiere presumir de poderío digital. Así lo revela el índice anual elaborado por la escuela de negocios suiza IMD bajo el epígrafe Ranking de Competitividad Mundial. No obstante, España ha logrado escalar tres posiciones recuperando su puesto prepandemia, aunque en el número 28, todavía se encuentra lejos de principales potencias como Dinamarca, Reino Unido, Francia o Irlanda. Entre los factores que han posibilitado la escalada, según apunta el propio Instituto, se encuentran el aumento de gasto público en educación e inversiones en investigación y desarrollo (I+D), así como a la "agilidad empresarial" del sector privado.
Dónde poner el foco
La clasificación elaborada por el IMD cuantifica las capacidades de un total de 63 países de todo el mundo para adoptar, promover y aplicar el uso de las nuevas tecnologías para transformar las prácticas gubernamentales, la economía y, de manera generalizada, la sociedad en su conjunto. En este sentido no extraña la importancia de la colaboración público-privada que impulsa el informe para lograr los objetivos definidos con anterioridad. Esta alianza es, según el IMD, clave para promocionar la estructura digital de los países y protegerla.
Siguiendo esta misma estela, aunque con el foco a nivel nacional, el IMD advierte sobre las principales áreas donde poner el acento para lograr ventajas competitivas frente al resto de países. Así, en el caso de España, las principales barreras las encontramos en el acceso a la financiación y la burocracia administrativa, especialmente en la esfera pública. Como consecuencia se debe trabajar en este punto y no solo afianzar la posición de España en el vigesimoctavo peldaño, sino aspirar a encumbrar el ranquin. Para lograrlo, uno de los aspectos a explotar es la ciberseguridad, baza estratégica en el caso español.
La ciberseguridad, clave
España obtiene resultados especialmente significativos en materia de ciberseguridad gubernamental, ascendiendo hasta la posición 12. Una escalada que reconoce la capacidad de las instituciones para hacer frente a ataques en su infraestructura digital. En este aspecto, España está por delante de Portugal, Italia o Grecia. Precisamente en este edición 2022 el IMD ha puesto de relieve que las medidas de ciberseguridad serán “determinantes” para la competitividad digital del futuro. A colación, Arturo Bris, director del Centro de Competitividad Mundial del IMD, describe a las naciones digitales como aquellas con una "combinación de talento digital, normativa digital, gobernanza de datos, actitudes digitales y la disponibilidad de capital". Una receta a perseguir por todos y cada uno de los países que aspiren a liderar la profunda transformación digital que vivimos hoy en día.
