La UPC pone en funcionamiento una intranet de formación y actualización de conocimientos
3.000 personas utilizarán el sistema Poliedre
La Universidad Politécnica de Cataluña ha puesto en funcionamiento una intranet para la formación y actualización permanente de conocimientos del personal académico y de administración y servicios. El proyecto telemático Poliedre permitirá la creación de cursos y comunidades virtuales que dará servicio a un total de 3.000 personas.
Hasta 1997, la Oficina de Formación Académica (OFA) centra su actuación en el personal de administración y servicios. Ha ampliado su cometido con cursos para el personal académico basados en planes estratégicos de la Politécnica: formación en áreas como el marketing (para incrementar la transferencia de tecnología), el liderazgo y la dirección general.
El nuevo servicio de teleformación responde “a la constatación de que la gente cada vez tiene menos tiempo para dedicarlo a la formación y tolera menos estar en un aula”, explica Gloria Poal, Jefe de la OFA. También servirá para equilibrar los distintos niveles formativos e implicar más al personal en el aprendizaje.
Las herramientas telemáticas permitirán que cada usuario se administre y decida el ritmo, dedicación y momento de estudio. La mayor fragmentación de la información facilitará también dosificar la formación según cada necesidad. Los usuarios podrán acceder desde cualquier ordenador de la red de la Politécnica o desde sus domicilios a través de Internet con la clave de entrada utilizada en el resto de intranets de la UPC.
La incorporación de material será de forma progresiva, explica Mª Àngels Campillo, técnica de la OFA. La aparición de cursos y comunidades virtuales no significará la desaparición de la formación presencial, sino que la reforzará. Se ha desestimado de momento utilizar tecnologías multimedia para evitar problemas con la red.
Esta universidad “impartirá cursos en los que, para rentabilizar la inversión, puedan tener acceso mucha gente”. Poliedre se estrena con un curso piloto de Internet para 100 personas, que posteriormente será ampliado. “Si tuviéramos que organizar cursos de Internet para todos los que no saben (quizás mil, de los 3.000 empleados) no acabaríamos nunca”. También se introducirán inicialmente dos comunidades virtuales: protocolo y organización de actos y comunicación científica. A finales de año se ampliará con nuevos cursos y comunidades.
Cursos según perfiles
El funcionamiento de la intranet permite adecuar los conocimientos y la formación a la tipología del personal. Poliedre está vinculada a la base de datos integrada “y tremendamente compleja”, según Poal, que hay entre el servicio de personal y recursos humanos. Al sistema se ha añadido la identificación de una serie de perfiles: el servicio reconoce a la persona y a su perfil. El perfil optimiza entonces el acceso de los usuarios a los distintos cursos y comunidades digitales.
La herramienta está inspirada en la gestión del conocimiento, “que es un concepto más amplio que la intranet”. Supone pasar de una formación presencial en aulas de un máximo de treinta personas a comunidades virtuales de mil usuarios en momentos determinados. “El hecho de que la gente transfiera conocimiento mutuamente es una de las gran sinergias de la intranet”, afirma Gloria Poal.
Los perfiles laborales, según Mª Àngels Campillo, recogen la tipología de los colectivos en función del puesto de trabajo (por ejemplo, administrativo y secretaria). Cada vez que alguien se incorpora a la universidad o cambia su vinculación, el servicio de personal toma ese dato y lo actualiza en la base de datos (hay alrededor de 300 tipologías de empleo distintas).
Entonces se crean grupos (hay unos 100 perfiles). Cuando se añada un nuevo curso o comunidad se envía un correo electrónico a los usuarios que cumplen el perfil.
Por otra parte, todos los perfiles acceden a una serie de apartados de los cursos y comunidades para que el conocimiento se difunda incluso en puestos de trabajo que no sean los propios, de forma que si a un ordenanza le interesa el protocolo no podría opinar (no dispone del conocimiento) pero sí adquirir una parte de la información para una futura promoción.
Gestor personal
El servicio Poliedre ofrece toda la información integrada. Cuenta con dos grandes apartados: las comunidades virtuales y cursos y el gestor personal, que permite al usuario decidir el nivel informativo al quiere ser sometido y acceder a su consultor. El segundo bloque es el espacio de conocimiento, donde todos los usuarios acceden a los resultados de los cursos y comunidades digitales. Los dinamizadores colocan enlaces, bibliografía y compactan la información en paquetes de preguntas y respuestas más frecuentes y relevantes.
El servicio Poliedre irá creciendo paulatinamente, tras asegurar que existe entre el personal suficiente cultura de la información. “Implantar estas herramientas y tecnologías no conllevan al éxito si no existe previamente esa cultura”, concluye Gloria Poal.
Hasta 1997, la Oficina de Formación Académica (OFA) centra su actuación en el personal de administración y servicios. Ha ampliado su cometido con cursos para el personal académico basados en planes estratégicos de la Politécnica: formación en áreas como el marketing (para incrementar la transferencia de tecnología), el liderazgo y la dirección general.
El nuevo servicio de teleformación responde “a la constatación de que la gente cada vez tiene menos tiempo para dedicarlo a la formación y tolera menos estar en un aula”, explica Gloria Poal, Jefe de la OFA. También servirá para equilibrar los distintos niveles formativos e implicar más al personal en el aprendizaje.
Las herramientas telemáticas permitirán que cada usuario se administre y decida el ritmo, dedicación y momento de estudio. La mayor fragmentación de la información facilitará también dosificar la formación según cada necesidad. Los usuarios podrán acceder desde cualquier ordenador de la red de la Politécnica o desde sus domicilios a través de Internet con la clave de entrada utilizada en el resto de intranets de la UPC.
La incorporación de material será de forma progresiva, explica Mª Àngels Campillo, técnica de la OFA. La aparición de cursos y comunidades virtuales no significará la desaparición de la formación presencial, sino que la reforzará. Se ha desestimado de momento utilizar tecnologías multimedia para evitar problemas con la red.
Esta universidad “impartirá cursos en los que, para rentabilizar la inversión, puedan tener acceso mucha gente”. Poliedre se estrena con un curso piloto de Internet para 100 personas, que posteriormente será ampliado. “Si tuviéramos que organizar cursos de Internet para todos los que no saben (quizás mil, de los 3.000 empleados) no acabaríamos nunca”. También se introducirán inicialmente dos comunidades virtuales: protocolo y organización de actos y comunicación científica. A finales de año se ampliará con nuevos cursos y comunidades.
Cursos según perfiles
El funcionamiento de la intranet permite adecuar los conocimientos y la formación a la tipología del personal. Poliedre está vinculada a la base de datos integrada “y tremendamente compleja”, según Poal, que hay entre el servicio de personal y recursos humanos. Al sistema se ha añadido la identificación de una serie de perfiles: el servicio reconoce a la persona y a su perfil. El perfil optimiza entonces el acceso de los usuarios a los distintos cursos y comunidades digitales.
La herramienta está inspirada en la gestión del conocimiento, “que es un concepto más amplio que la intranet”. Supone pasar de una formación presencial en aulas de un máximo de treinta personas a comunidades virtuales de mil usuarios en momentos determinados. “El hecho de que la gente transfiera conocimiento mutuamente es una de las gran sinergias de la intranet”, afirma Gloria Poal.
Los perfiles laborales, según Mª Àngels Campillo, recogen la tipología de los colectivos en función del puesto de trabajo (por ejemplo, administrativo y secretaria). Cada vez que alguien se incorpora a la universidad o cambia su vinculación, el servicio de personal toma ese dato y lo actualiza en la base de datos (hay alrededor de 300 tipologías de empleo distintas).
Entonces se crean grupos (hay unos 100 perfiles). Cuando se añada un nuevo curso o comunidad se envía un correo electrónico a los usuarios que cumplen el perfil.
Por otra parte, todos los perfiles acceden a una serie de apartados de los cursos y comunidades para que el conocimiento se difunda incluso en puestos de trabajo que no sean los propios, de forma que si a un ordenanza le interesa el protocolo no podría opinar (no dispone del conocimiento) pero sí adquirir una parte de la información para una futura promoción.
Gestor personal
El servicio Poliedre ofrece toda la información integrada. Cuenta con dos grandes apartados: las comunidades virtuales y cursos y el gestor personal, que permite al usuario decidir el nivel informativo al quiere ser sometido y acceder a su consultor. El segundo bloque es el espacio de conocimiento, donde todos los usuarios acceden a los resultados de los cursos y comunidades digitales. Los dinamizadores colocan enlaces, bibliografía y compactan la información en paquetes de preguntas y respuestas más frecuentes y relevantes.
El servicio Poliedre irá creciendo paulatinamente, tras asegurar que existe entre el personal suficiente cultura de la información. “Implantar estas herramientas y tecnologías no conllevan al éxito si no existe previamente esa cultura”, concluye Gloria Poal.
