Veterinarios

Una parte muy importante de la labor del veterinario se desarrolla en lo que se conoce como primario, y concretamente en la ganadería productiva . La otra, la relacionada con los animales de compañía, pertenece a un mundo en el que el rendimiento de los animales se mide por criterios difíciles de clasificar . Cualquiera sea el campo en el que trabajen, los veterinarios coinciden: Internet es una formidable herramienta profesional . La variedad de intereses que configuran el ejercicio de la medicina veterinaria, que también se refleja en las técnicas para tratarlos, influye en el uso que hacen de la red las distintas especialidades . Estamos rodeados de animales, pero la relación que establecemos con ellos no es unívoca, como se verá a continuación .

En casi todas las ciencias empíricas, de lo evidente se ha ido a lo oculto o subyacente . La genética es hoy una rama fundamental de la medicina, de la veterinaria y de la botánica, más reciente en los dos últimas que en la primera . Por esta razón, Javier Cañón ( jcanon@eucmax . sim . ucm . es ) coordinador del Servicio de Genética Clínica Veterinaria, departamento externo de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid –que se especializa en la investigación y aplicación de técnicas genéticas moleculares y cuantitativas tanto en especies ganaderas, como en animales de compañía y especies silvestres– señala que los problemas que se plantean en la genética humana, resurgen en veterinaria con algunos años de retraso .

“En la investigación del genoma humano –dijo Javier Cañón a esta revista– se han invertido millones de dólares, porque es allí donde cualquier descubrimiento tiene un retorno económico . En cambio, en veterinaria, ¿ a quién le importa el cáncer de mama de una cerda, que seguramente muere antes de que se le pueda diagnosticar ? . No obstante, ahora mismo nuestro departamento tiene servicios en los que no podríamos trabajar si no fuera por Internet . Un ejemplo: si queremos publicar una secuencia de ADN en una revista científica tenemos que enviar una base de datos con esa secuencia y esto se hace con un formulario que se obtiene a través de Internet y se envía por Internet . Hay millones de secuencias de ADN que están acumuladas en bases de datos a las que se accede por Internet . Es inimaginable que alguien que trabaja en genética veterinaria no esté conectado a Internet . Quien diga lo contrario, lo único que hace es leer libros, pero no trabajar; así de vital es Internet para nosotros” .

En cierto modo, la página en Internet del Servicio de Genética Clínica Veterinaria de la UCM ( www . ucm . es/info/genetvet ) sirve no tanto para captar clientes potenciales, que ya saben de su existencia y de las herramientas que utilizan, como para dar a conocer su nivel de competitividad . Las páginas de este tipo son escaparates, en los que se pone de relieve ( o se oculta ) lo que se hace, por motivos muy diversos . Una información como la del servicio de la Complutense tiene sus ventajas, pero también sus inconvenientes, en tanto que informa de proyectos así como de su financiación . “Que yo sepa no hay página como la nuestra” . Añade Cañón: “pienso que Internet favorece sobre todo al consumidor, en la medida en que todos estamos retratados en la página y debemos ofrecer el mismo grado de competitividad que organismos privados . Nosotros nos dedicamos tanto a la genética de los animales de renta, como a la de los de compañía que, evidentemente, no es lo mismo . En el caso de los animales de compañía, nuestro trabajo está más enfocado al pedigrí y a las enfermedades hereditarias . En el caso de la aves exóticas, nos dedicamos al sexado de las mismas, técnica que no existe en ninguna otra parte del mundo porque la hemos desarrollado nosotros” .

Sobre la propiedad intelectual, dice Cañón que en Internet hay bases de datos y herramientas para manejar secuencias de ADN a las que tiene acceso todo el mundo . Pero esa libertad de acceso tiene la contrapartida del secretismo, debido a que la inversión de las empresas privadas busca el retorno económico, que es su razón de ser . Por eso, la mítica libertad de acceso la información, que se pregona como un mérito de Internet, no es tal al ciento por ciento . “Si se han invertido muchos millones de dólares para hacer un descubrimiento, no se pone éste a disposición de cualquiera sin haber recuperado la inversión . Por lo general, el dinero no lo ha puesto un servicio público sino empresas privadas –concluye Javier Cañón– y por esto, cuando se dice que todo está en la red, se está diciendo que tal vez está el 99,9 por ciento, pero ese 0,1 por ciento que no está es muy significativo . Nosotros no ponemos en la red descubrimientos que no hemos podido desarrollar tecnológicamente, porque los pueden copiar . Esta limitación también está presente en toda la información que se encuentra en la red pero que tiene los derechos reservados, como son los artículos de las revistas científicas” .

Del vacuno y otras especies productivas

La carne y leche son productos básicos para la alimentación humana . La frisona, esa vaca familiar negra con manchas blancas o ¿ blanca con manchas negras ? , la lechera de toda la vida, es el objeto de los desvelos del veterinario Joaquín Ranz ( jranz . vets@compuserve . com ) , especialista en vacuno de leche que, según dice, no ve prácticamente más que vacas . Ranz trabaja en la zona centro de España y su “clínica” de Arganda, la tiene que llevar a cuestas . Su especialidad no es sólo la veterinaria clínica; también se encarga de la alimentación, la reproducción o la inseminación artificial .

Para un profesional independiente como Ranz, que trabaja con otros dos compañeros, Internet supone una vía magnífica de información . Sobre todo la proveniente de Estados Unidos, cuya i