Comunicaciones

Una verdadera interacción con la Seguridad Social

La TGSS prosigue en su meta hacia la automatización

Afiliación, recaudación y pago de prestaciones centra los esfuerzos de la Subdirección General de Informática de la Tesorería General de la Seguridad Social, que basa su gestión en el apoyo sostenido de las más modernas Tecnologías de la Información. En la casa se sienten privilegiados con las dotaciones presupuestarias que reciben en materia de TI, pero, en su defensa alegan que son cruciales para mantener una base de 16 millones de trabajadores en el ámbito de la recaudación y afiliación, y otros 7,7 millones de pensionistas.

La Tesorería General de la Seguridad ha contado con un presupuesto de 38,5 millones de euros para Compras y otros 60 millones de euros destinados a Servicios, para acometer diversos proyectos relacionados con su automatización a lo largo de 2002. Aunque han realizado mejoras de las líneas, o acometido proyectos de integración de voz y datos, los más relevantes son los relacionados con la puesta de servicios en Internet, PROSA y la puesta en marcha de un proyecto para la creación de un centro de respaldo.
La gestión de la Seguridad Social está centralizada en Madrid, extendiéndose a una red de 1.300 oficinas en las que hay alrededor de 1.500 redes locales, con aproximadamente 30.000 terminales que generan más de 10 millones de transacciones diarias de un total de 2.500 acciones distintas.
La información reside en un mainframes OS/390 de IBM, apoyados en su gestión por sistemas abiertos, entre los que destaca un Sunfire 15000 con tecnología SMP y sistema operativo Solaris, que se conectan al resto de la organización mediante sistemas de firewalls y de protección de seguridad. El sistema de confidencialidad es Getaccess.
Actualmente el 90% de la gestión de recaudación se hacer por medios telemáticos a través de R.E.D, una solución basada en X.400 cuyos días están contados. El objetivo es migrar el sistema a Internet, algo que espera conseguirse antes de finales de año. Por el momento el 20% de la gestión telemática ya ha sido migrada y los nuevos colaboradores que se incorporen al sistema lo harán directamente con Internet con el objetivo final de que haya una única entrada.
Los usuarios tan sólo requieren un navegador y la instalación de un software de red seguro. “Les facilitamos el certificado de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre y un software de verificación de información de desarrollo interno que contrasta todos los datos y evita que haya problemas en el envío, obligando a requerir validación del gestor para que vaya nuevamente a la SS”, aclara Eladio Quintanilla, subdirector general de Informática de la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS). Por el momento se han expedido 87.000 certificados, entre ciudadanos y entidades colaboradoras.
A través de R.E.D era posible realizar altas sucesivas y bajas, cambio de grupo de cotización, modificación de movimientos previos, consulta de número de afiliación o consultas sobre la situación de la empresa entre otros. A éstos se les suma, por el momento, otros 25 servicios en Internet desde donde, tanto usuarios como colaboradores, podrán consultar la situación de afiliados, la percepción de pensiones públicas, solicitar duplicados de TA 1/3, certificados de situación de cotización, o de ingresos del ejercicio económico, informes de la vida laboral, entre otros.

Desarrollo de la plataforma
“Cuantos más servicios saquemos a Internet más cerca podremos estar de los ciudadanos. Resulta impensable en los tiempos que corren que la gente tenga que desplazarse a una oficina a pedir un certificado o dar de alta a personal del servicio doméstico. Nuestro objetivo es agilizar la Seguridad Social y, poco a poco, lo vamos consiguiendo”, afirma Quintanilla.
La introducción de medios telemáticos en el organismo ahorra la entrada manual del 90% de los datos de afiliación y recaudación, un elevado porcentaje, considerando que el total equivale a 16 millones de líneas que deben tomarse mensualmente. Además de optimizar los Recursos Humanos, el método aporta una mayor fiabilidad de la información, al evitar los errores del equipo de grabación de datos.
De la misma forma, la verificación previa del software y la velocidad de la transmisión hacen que los datos puedan estar disponibles mucho antes, redundando todo ello en el desarrollo de mejores servicios. En el caso de las pensiones, por ejemplo, el tener conocimiento de las cotizaciones de forma más rápida incide en que el benefiario pueda obtener antes sus prestaciones. “Antes había hasta ocho meses de demora para que un trabajador que adquiría la condición de jubilado cobrara. Ahora son 12 días, no hay interrupción en el cobro del salario, y eso se consigue a fuerza de reducir plazos”, apunta Eladio Quintanilla.

Implantación de PROSA
La modernización de los sistemas de la Seguridad Social encuentra en PROSA (Sistema Informático para la Gestión de la Protección Social) un gran impulso. El proyecto se inició en 2001 y pretende culminarse en 2004. Además de la gestión básica de la Seguridad Social, PROSA también integrará la ofimática. Aunque para 2003 está previsto disponer del 50% de los procedimientos activos, que convivirán con los del actual sistema. Se ha diseñado un plan en el que coexistirán ambos sistemas hasta que se ultimen todos los procedimientos de PROSA y el funcionario esté adaptado.
Los condicionamientos técnicos y socioeconómicos han llevado a la Tesorería General de la Seguridad Social a una redefinición de sus Sistemas de Información de cara a automatizar la gestión. “Nuestra gestión estaba basada en transacciones independientes que llaman a diferentes aplicativos para resolver objetivos concretos. El resultado es que se ejecutaban transacciones no conectadas entre sí que requerían una actuación manual no reflejada en el proceso informático, dejando mucho a la sabiduría del funcionario y provocando paradas en el procedimiento para obtener información de fuentes externas”, explica Eladio Quintanilla.
La carencia de una relación entre funciones y tareas a realizar para la consecución de un objetivo determinado lleva a la Gerencia de Informática de la TGSS a una apuesta por los medios telemáticos para agilizar y normalizar los procesos.
El sistema reinante hasta la entrada de PROSA se puso en marcha en 1990, bajo una configuración apoyada en sistema operativo MVS, contra base de datos Adabas, en lenguaje Natural y Cobol. La actualización se plantea no tanto por una cuestión de rendimiento, cuyos niveles han sido siempre óptimos, con tiempos de respuesta medios inferiores a un segundo, sino por “la evolución del arte”, como afirma Eladio Quintanilla. “Lo que se pretende –continúa Quintanilla-, supone pasar de un sistema basado en transacciones a otro basado en procedimientos automatizados. Consiguiendo que los funcionarios accedan al sistema para ejecutar los procedimientos y evitar dejar este asunto al arbitrio de su particular conocimiento”.
PROSA se apoyará en un workflow que servirá de guía a la ejecución de cada procedimiento. Estará basado en Java, de manera que los terminales trabajarán sobre navegadores, frente a los 3270 empleados actualmente. La base de datos será Adabas, pero está previsto la colocación de un front end que no

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