Oki sobrevive a la crisis
El fabricante cerrará el presente ejercicio, que finaliza el próximo 31 de marzo, con unas ventas de 230 millones de euros, un 10,36% más si se compara con el año anterior. Su presidente para Iberia, Javier Toledo, confía en mantener el año que viene las cifras de ventas de 2008, a pesar de la crisis.
Oki, lejos de padecer los problemas económicos que empiezan a afectar a otras empresas, ha visto cómo las ventas previstas para su último ejercicio fiscal, que finalizará el próximo 31 de marzo, se incrementarán un 10,36% respecto al ejercicio anterior. El fabricante obtendrá una facturación de 230 millones de euros. El optimismo que proporciona haber experimentado un crecimiento continuo durante los últimos años se traduce en calma tensa para el ejercicio que comienza, ya que “confíamos en mantener el año que viene las cifras de ventas de 2008”, señala Javier Toledo, presidente de OKI Sytems Ibérica.
En cuanto al reparto de los ingresos por áreas de negocio, la impresión seguirá siendo el segmento “fuerte” del fabricante nipón que espera que su facturación crezca por la incorporación de nuevas líneas de producto. En lo relativo a las centralitas IP, el fabricante facturó cuatro millones de euros.Asimismo, Toledo afirma que "la distribución de su demanda está muy equilibrada entre la pyme y las AA.PP, siendo menor el peso en las grandes corporaciones".
La diversificación de negocio seguirá siendo una prioridad de la compañía para este año. Según Javier Toledo, la compañía desarrollará una nueva línea de actividad sobre la seguridad biométrica.
