En 1999 se venderán 107 millones de PCs

Según datos de la consultora Dataquest, en 1999 se venderá un total de 107 millones de unidades de ordenadores personales. Esta cifra supone un incremento del 95,5 por ciento respecto a los 56 millones de ordenadores comprados durante este año.

Ahora bien, el año no ha comenzado con muy pie para los fabricantes de PCs. La consultora afirma que el negocio se ralentizará durante los primeros meses del año debido al aumento de la producción producida por la campaña de navidad. El incremento de los sistemas en stock obligará a parar los pedidos aproximadamente durante los próximos dos meses.

Dataquest ha realizado otras previsiones en el ámbito de los ordenadores personales para los próximos años. Esta consultora asegura que Cyrix competirá con fuerza en este mercado con su versión del procesador Pentium Pro de Intel. La unión entre AMD y Nexgen tendrá que esperar bastante tiempo hasta lograr un nivel alto de competitividad.

A finales de esta década la unidad CD-ROM sustituirá a la disquetera y se convertirá en un auténtico estándar. Los ordenadores portátiles serán los primeros en incorporarla de forma generalizada. Durante 1997 ó 1998, el CD-ROM alcanzará los 5 GB de capacidad. En un período aproximado de 15 años, el almacenamiento ascenderá a un nivel que oscila entre 30 y 50 GB.

Para los analistas de Dataquest, la Plataforma PowerPC (CHRP) de Apple, IBM y Motorola no tendrá un gran impacto en el mercado, a pesar de las últimas presentaciones en el Comdex. Según Dataquest, un cliente puede adquirir una placa Pentium por 15.000 pesetas, algo impensable con CHRP.

El sistema operativo Windows NT de Microsoft comenzará a tener una presencia significativa en el mercado corporativo a finales de 1996 y ofrecerá a las compañías una oportunidad para tener sus datos en un entorno seguro.

Otra de las características que tendrá un carácter prioritario en el entorno PC serán los gráficos en 3D. La generalización de este tipo de gráficos se producirá en primer lugar en el ámbito de los juegos para ordenador, pasando a las aplicaciones de ofimática a partir de 1997.

El precio de los portátiles sufrirá una caída considerable, principalmente por la rebaja en el coste de las pantallas TFT (de 120.000 a 60.000 pesetas). Asimismo, las baterías de ión-litio se instalarán en un 40 por ciento de los sistemas a finales de 1996.