Estados Unidos demanda a Google por prácticas monopolísticas en su negocio de publicidad digital

El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha demandado a Google, el motor de búsqueda de Alphabet, acusándole de prácticas anticompetitivas al abusar de una posición dominante en el ámbito de la publicidad digital, y le ha instado a vender esta parte de su negocio, la de administración de anuncios,  que generó el 12% de sus ingresos en 2021.

Sin embargo, este segmento también desempeña un papel vital en las ventas generales del buscador y de las soluciones de la tecnológica en la nube. “Ha utilizado métodos anticompetitivos, excluyentes e ilegales para eliminar o disminuir cualquier amenaza en el sector de la publicidad digital”, reza la demanda.

Por su parte, la tecnológica alega que el Gobierno ha caído en un argumento “erróneo”, que frena la innovación y que “aumentaría las tarifas de publicidad y dificultaría el crecimiento de miles de pequeñas empresas y editores”.

En declaraciones recogidas por Reuters, Charlotte Slaiman, directora de política de competencia de Public Knowledge, expresa que “Estados Unidos está apuntando directamente a la cúspide del poder de la organización. Las quejas exponen las muchas estrategias que ha utilizado Google y que han frenado nuestro ecosistema de Internet”.

Esta demanda, a la que se han unido ocho estados, incluido California, donde se ubica Google, viene precedida de una que ya se realizó en 2020 bajo el mandato de Donald Trump. Esta ha generado que sus acciones cayeron un 1,9% durante la jornada de ayer.

Además de su servicio gratuito de búsqueda, Google genera ingresos a través de sus negocios entrelazados de tecnología publicitaria. Por ello, el Gobierno solicita la venta de Google Ad Manager y ADX. Ad Manager es un conjunto de herramientas que permite que las páginas web ofrezcan espacios publicitarios para la venta y un intercambio que sirve a un mercado que conecta automáticamente a los anunciantes con los editores. Estos últimos se han quejado de que la firma no ha sido transparente en estas acciones y en el reparto de dinero de los anuncios, específicamente en cuánto se queda Google y cuánto se reparte a los editores.

Aunque la compañía sigue siendo líder destacado de este mercado, sus ingresos, a este respecto, cayeron un 28,8% durante el año pasado y un 36,7% desde 2016.