Fallece César Alierta, expresidente de Telefónica

Muere un histórico. César Alierta, empresario desde la cuna y ‘político’ por aproximación, ha fallecido este miércoles en su Zaragoza natal a los 78 años de edad a causa del empeoramiento de una neumonía. Conocido como uno de los empresarios más relevantes de comienzo de siglo en España, Alierta deja en este mundo un legado indiscutible. Entre los grandes hitos cosechados, su papel como artífice de la expansión internacional de Telefónica, su modernización y digitalización. Y es que el expresidente del emblema nacional de las telecomunicaciones capitaneó el barco entre julio del 2000 y abril de 2016, cuando la compañía alcanzó la mayor dimensión de su historia, dejando atrás su naturaleza pública y convirtiéndose en uno de los mayores representantes corporativos ‘made in Spain’. En su currículum vitae destaca, también, la presidencia de Tabacalera entre 1991 y 1996 o el liderazgo ejercido en la Fundación Zaragoza 2032.

Trayectoria profesional

Alierta forjó su carácter y trayectoria profesional en el seno de la empresa privada, concretamente al abrigo de Banco Urquijo, puesto desde el que dio el salto a Beta Capital. Por aquel entonces, compaginaba su cargo como presidente y principal accionista de la fundación de la sociedad de valores con la presidencia del Instituto Español de Analistas Financieros. Tras deshacerse de la mayor parte de las acciones, con la llegada de los ‘populares’ al poder, Alierta recaló en Tabacalera, desde donde condujo el proceso de privatización de la entidad. Durante esta etapa el empresario se vio salpicado por la investigación del conocido como Caso Tabacalera, aunque fue absuelto de las acusaciones de uso de información privilegiada para la compra de acciones de la compañía tras haber prescrito las mismas.

Después de su paso por Tabacalera, Rodrigo Rato, entonces ministro de Economía del Gobierno de José María Aznar, le eligió para comandar Telefónica. Tomó el relevo de Juan Villalonga ejecutando importantes apuestas en materia de transformación digital y políticas de expansión. Con aciertos y errores, logró situar a Telefónica como uno de los mayores operadores del mundo y a la cabeza de los principales operadores europeos. Desde la organización que un día presidió no han dudado en mostrar sus condolencias: “Es un día triste para la familia Telefónica. Todos somos depositarios del inmenso legado que nos deja César Alierta, un corazón abierto de par en par, apasionado, inteligente y valiente. Su visión de futuro y su intuición le llevaron siempre a intentar cambiar el mundo a mejor”.

Más allá de sus periplos como empresario, la figura de Alierta es indisociable del poder político; y es que desde su etapa en Telefónica siempre cuidó las relaciones con Gobierno y Oposición. De hecho, en los más de tres lustros al frente de la presidencia de la operadora, convivió con tres presidentes del gobierno (José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy), permaneciendo siempre impasible a las presiones dirigidas desde el hemiciclo. Sin embargo cabe destacar que esa cercanía con la clase política bien le valió algún que otro escarnio público; por ejemplo, con motivo de los fichajes de Iñakai Urdangarín, Eduardo Zaplana o el propio Rodrigo Rato.