Twitter despide al 83% de su plantilla en España y se queda con cinco trabajadores

Twitter España se ha sumado esta semana a la ola de despidos que azota a las grandes tecnológicas en todo el mundo, pero lo ha hecho al estilo de Elon Musk. Tras semanas de negociación, los abogados de la red social finalmente dieron su brazo a torcer y decidieron poner en marcha un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y despedir a 24 de los 29 empleados que la compañía tenía en Madrid, un 83% de la plantilla. 

Según confirmó El Confidencial, solo cinco trabajadores de las áreas de ventas y negocio han aceptado las condiciones de la empresa para quedarse, pero ya no tendrán un lugar físico para trabajar, ya que Twitter también cerró sus oficinas en Madrid. 

Los despidos se harán efectivos el próximo 8 de febrero y los afectados recibirán una indemnización de 33 días por año trabajado. Esto supone una victoria para los empleados salientes por dos razones: la primera, porque Twitter pretendía indemnizarlos en un principio con 20 días por año trabajado, y la segunda, porque la compañía pretendía finiquitar los despidos antes del 1 de febrero para evitar pagar las stock options que les correspondían. 

"En el ERE no habían puesto una razón válida, solo que por productividad. Se les amenazó, han tenido que dar su brazo a torcer y no les ha hecho ninguna gracia. Esto lo ha tenido que firmar Elon Musk personalmente, porque tiene que ser así a partir de cierta cantidad (de despidos). Me alegro de que ahora les hayan fastidiado, porque les hemos sacado lo que queríamos", expresa uno de los afectados al medio. 

Los agresivos recortes de personal y gastos han sido la tónica desde la llegada de Elon Musk a la dirección de la empresa hace más de tres meses. Desde que el magnate compró Twitter, ha despedido a la mitad de su plantilla a nivel mundial, ha impuesto condiciones laborales estrictas e injustas, y ha decidido reducir costes a expensas de sus proveedores, a quienes ha decidido no pagarles.

Así, el millonario había dado a sus empleados un ultimátum de 36 horas en el que debían aceptar unas duras condiciones de trabajo o se asumiría su renuncia. El resultado fue una salida en masa de Twitter. También se conoció que Musk había dado órdenes de dejar de pagar a sus proveedores, lo que incluía el pago del alquiler de sus oficinas en diversas partes del mundo. 

Con solo cinco trabajadores restantes y sin oficinas, queda por ver si Twitter se mantendrá con débiles signos vitales en España o si sus funciones serán absorbidas por la sede de la red social en Irlanda.