Francia impondrá impuestos a las gigantes tecnológicas en 2019

Mientras los miembros de la Unión Europea continúan discutiendo si imponer o no un impuesto, el ministro francés de finanzas, Bruno Le Maire, dijo que la medida francesa entraría en vigencia "sin importar qué" el 1 de enero. Según el político, el impuesto recaudará 500 millones de euros en su primer año.

El país vecino todavía espera que se pueda llegar a un acuerdo a nivel de la Unión Europea en marzo sobre impuestos a las empresas de tecnología. Sin embargo, los estados miembros están divididos en cuanto a cómo abordarlos, y algunos, entre ellos Irlanda, argumentan que cualquier nuevo gravamen podría cubrirse con represalias de los EE. UU.

El problema principal es que un nuevo modelo fiscal requiere un voto unánime: todos los países miembros de la Unión Europea deben votar por la reforma. Si bien los países con grandes mercados locales estaban a favor de la medida, muchos países más pequeños aún tienen que apoyar el nuevo impuesto.

Así que el gobierno francés está intentando algo nuevo. Le Maire cree que es mejor comenzar a gravar impuestos a las empresas de tecnología en Francia ahora y encontrar apoyo europeo más adelante.

Le Maire quiere apuntar a las grandes empresas de tecnología en particular, como son las GAFA. Y es cierto que Apple , Amazon y Google han tenido problemas en algún momento, ya que todas han sido acusados de beneficios fiscales ilegales y otros esquemas de evasión fiscal. En muchos casos, esas compañías han reportado ganancias bastante bajas en la mayoría de los países europeos, ya que han estado transfiriendo todas las ganancias a un país favorable de impuestos. Todavía no está claro cómo va a funcionar el impuesto francés, pero Le Maire dice que Francia analizará los ingresos por publicidad, los ingresos del mercado y los ingresos basados en datos personales.

Cabe mencionar que en España, el pasado mes de octubre, el Consejo de Ministros aprobó el anteproyecto de ley del impuesto sobre servicios digitales, que se enmarca dentro de los presupuestos generales del Estado del Ejecutivo de Sánchez, pendientes aún del visto bueno de la Comisión Europea y de la aprobación en el Parlamento español. La nueva tasa, prevista ya por el anterior Gobierno popular pues es un impuesto propuesto en la Unión Europea, gravará un 3% los ingresos generados por la publicidad online, la intermediación en línea y la venta de datos recopilada de la información que proporcionan los usuarios, lo que permitirá una recaudación por parte de Hacienda de 1.200 millones de euros, según las estimaciones realizadas por la propia Agencia Tributaria. 

No sólo Francia y España, Reino Unido también tendrá una tasa para las tecnológicas a partir de abril de 2020, según anunció el ministro de hacienda británico Philip Hammond. "Se trata de un impuesto cuidadosamente diseñado para asegurar que sean los gigantes tecnológicos establecivos, en lugar de nuestras nuevas empresas tecnológicas, quienes asuman la carga", aseveró Hammond.