Servicios y contenidos serán los puntales básicos de la Sociedad de la Información en España
Conclusiones del I Congreso Nacional de Profesionales IT
El I Congreso Nacional de Profesionales IT, certamen patrocinado, entre otros, por COMPUTERWORLD, se celebró hace unos días con el objetivo de dar a conocer los retos de la Sociedad de la Información (SI) española en una era interactiva. La posición de España y sus oportunidades dentro de un mundo cada vez más globalizado fueron los principales aspectos que se trataron en su desarrollo. De las conclusiones se pudo extraer un punto para la esperanza: la coincidencia entre el sector público y el sector privado de reforzar las infraestructuras y estimular el uso de las nuevas tecnologías “para no ser sólo un país consumidor de estas tecnologías”, en palabras de Elisa Robles, directora general de industrias y TI del MINER, en la sesión inaugural.
El Congreso, organizado por Astic (Asociación Profesional del Cuerpo Superior de Sistemas y TI de la Administración del Estado) y por Dintel (Fundación para la Difusión de las Ingenierías Informática y de Telecomunicación) y patrocinado por Microsoft, Data General, Telefónica, Teldat, Feria de Madrid y ComputerWorld, consiguió 400 personas registradas y una afluencia a lo largo de las cuatro sesiones realizadas de entre 70 y 80 personas, unos resultados “muy buenos” según han manifestado fuentes de los organizadores. Una de las primeras conclusiones establecidas fue la de considerar que tanto los servicios como los contenidos serán las bases de la industria de la SI en España. Así lo afirmó Robles al decir que “la innovación debe ir dirigida a la apuesta por las TIC, que son el pilar de la economía en esta edad de la información y por nuestro idioma, para elaborar contenidos digitales”. En esta tónica también coincidió Jaime González González, secretario de Estado para la Administración Pública, quien aseguró que “el desarrollo de la SI no podrá nunca hacerse sin la colaboración de los expertos en TIC, ya que los retos de esa sociedad abren oportunidades que deben utilizarse no sólo para el beneficio personal, sino sobre todo para el global”, y abogó por un lenguaje fácil a la hora de implicar a la sociedad en la “revolución que suponen las nuevas tecnologías”.
Tras la liberalización
Junto a González mostraron también su parecer sobre la actual situación de la SI española Valentín Sanz Caja, presidente del Ente Público de la Red Técnica Española de Televisión; Enrique Gutiérrez Bueno, decano del Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicación; y Eugenio Fontán Oñate, vocal asesor en telecomunicaciones del Presidente del Gobierno, quien incidió en el año que ha pasado desde que las telecomunicaciones se liberalizaron en España. Fontán estableció que con esta liberalización se ha conseguido el punto de partida de la SI en el país, y matizó que “aunque el Gobierno invierta en esta sociedad, al final debe quedar expectante y dejar hacer al sector privado”. A su vez, Javier de la Pinta, subdirector general de regulación corporativa de Telefónica, opinó que los aspectos pendientes de la liberalización son el desequilibrio de tarifas y la necesidad de determinar cuál es el coste del servicio universal, unos asuntos en los que “España está desfasada con relación a la media europea”. Por su parte, Antonio García Marcos, presidente de Teldat, reclamó “una política industrial para no perder una oportunidad única y dar lugar así a una mejor relación entre los operadores y la industria local”.
De hecho, del Congreso también se extrajo la necesidad de continuidad de relación entre el sector privado y la Administración. Este llamamiento se realizó especialmente desde el sector industrial, el cual pidió un mayor protagonismo en las inversiones en equipamiento de las nuevas tecnologías, para que no se desvíe la fabricación a corporaciones de carácter internacional. Asimismo, desde el sector privado se remarcó la necesidad de continuar la inversión por parte de la Administración en redes, un terreno en el que determinados ponentes coincidieron en que se estaba haciendo “un buen trabajo”. Todos los asistentes ofrecieron un aprobado al año de liberalización hasta ahora transcurrido.
Guetos
Un problema surgió de este certamen: la posibilidad de que se creen guetos dentro de la nueva Sociedad de la Información derivados de la potencia económica de aquellos que la formen. Para ello, se propuso una homologación más o menos cercana de la SI a la sociedad actual, y evitar así que el factor económico sea el predominante y, por ende, responsable del desfase entre unos componentes y otros de esa sociedad futura.
Pero no sólo se podrían producir agravios entre estas partes de la SI, sino que algunas ya existen si se compara la situación de España con respecto a otros países de Europa. Fue Josep María Vilá, presidente de SEDISI, el que afirmó que, aunque el sector camina correctamente, el país se encuentra todavía a la cola de Europa en cuanto a infraestructuras y consumo de datos, pero sin embargo auguró un crecimiento explosivo del comercio electrónico en los próximos años que traerá de la mano “una gran ineficiencia en la calidad del servicio, porque será humanamente imposible una adaptación paralela a la rápida evolución tecnológica, al menos hasta que se alcance una estabilidad”. Vilá también afirmó que “la innovación es el motor del cambio en las empresas españolas, porque aquellas que no rompan los esquemas clásicos, simplemente desaparecerán”.
Otro de los principales temas tratados fue el de seguridad y privacidad en Internet. En este terreno Carlos Galán, director de la Agencia de Certificación de Datos, comentó que “la certificación de datos permite al ciudadano la proximidad virtual, al incorporar los elementos requeridos de autentificación, integridad, legalidad y confidencialidad”, en referencia a la validación por Consejo de Ministros de la firma electrónica en España.
Finalmente, Astic realizó una presentación formal de propuesta de contenidos del Libro Blanco para las TIC en España. Jorge Rubio, presidente de Astic, exigió de hecho una revisión de los planteamientos de la Administración en determinadas áreas de actuación que contribuyeran a mejorar la participación de los profesionales de las TIC en su desarrollo. El certamen se completó con distintas apreciaciones sobre la innovación tecnológica en áreas como la educación, la cultura y la sanidad en la Administración (con Rafael Catalá Polo, director de personal del Ministerio de Educación y Cultura y Fernando Martín Sánchez, miembro de la Sociedad Española de Informática y Salud, como ponentes) y de la colaboración de las TIC en un mayor desarrollo e implantación del español (tema sobre el que habló Andrés Elhazar Molina, director del Centro Virtual Cervantes).
El Congreso, organizado por Astic (Asociación Profesional del Cuerpo Superior de Sistemas y TI de la Administración del Estado) y por Dintel (Fundación para la Difusión de las Ingenierías Informática y de Telecomunicación) y patrocinado por Microsoft, Data General, Telefónica, Teldat, Feria de Madrid y ComputerWorld, consiguió 400 personas registradas y una afluencia a lo largo de las cuatro sesiones realizadas de entre 70 y 80 personas, unos resultados “muy buenos” según han manifestado fuentes de los organizadores. Una de las primeras conclusiones establecidas fue la de considerar que tanto los servicios como los contenidos serán las bases de la industria de la SI en España. Así lo afirmó Robles al decir que “la innovación debe ir dirigida a la apuesta por las TIC, que son el pilar de la economía en esta edad de la información y por nuestro idioma, para elaborar contenidos digitales”. En esta tónica también coincidió Jaime González González, secretario de Estado para la Administración Pública, quien aseguró que “el desarrollo de la SI no podrá nunca hacerse sin la colaboración de los expertos en TIC, ya que los retos de esa sociedad abren oportunidades que deben utilizarse no sólo para el beneficio personal, sino sobre todo para el global”, y abogó por un lenguaje fácil a la hora de implicar a la sociedad en la “revolución que suponen las nuevas tecnologías”.
Tras la liberalización
Junto a González mostraron también su parecer sobre la actual situación de la SI española Valentín Sanz Caja, presidente del Ente Público de la Red Técnica Española de Televisión; Enrique Gutiérrez Bueno, decano del Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicación; y Eugenio Fontán Oñate, vocal asesor en telecomunicaciones del Presidente del Gobierno, quien incidió en el año que ha pasado desde que las telecomunicaciones se liberalizaron en España. Fontán estableció que con esta liberalización se ha conseguido el punto de partida de la SI en el país, y matizó que “aunque el Gobierno invierta en esta sociedad, al final debe quedar expectante y dejar hacer al sector privado”. A su vez, Javier de la Pinta, subdirector general de regulación corporativa de Telefónica, opinó que los aspectos pendientes de la liberalización son el desequilibrio de tarifas y la necesidad de determinar cuál es el coste del servicio universal, unos asuntos en los que “España está desfasada con relación a la media europea”. Por su parte, Antonio García Marcos, presidente de Teldat, reclamó “una política industrial para no perder una oportunidad única y dar lugar así a una mejor relación entre los operadores y la industria local”.
De hecho, del Congreso también se extrajo la necesidad de continuidad de relación entre el sector privado y la Administración. Este llamamiento se realizó especialmente desde el sector industrial, el cual pidió un mayor protagonismo en las inversiones en equipamiento de las nuevas tecnologías, para que no se desvíe la fabricación a corporaciones de carácter internacional. Asimismo, desde el sector privado se remarcó la necesidad de continuar la inversión por parte de la Administración en redes, un terreno en el que determinados ponentes coincidieron en que se estaba haciendo “un buen trabajo”. Todos los asistentes ofrecieron un aprobado al año de liberalización hasta ahora transcurrido.
Guetos
Un problema surgió de este certamen: la posibilidad de que se creen guetos dentro de la nueva Sociedad de la Información derivados de la potencia económica de aquellos que la formen. Para ello, se propuso una homologación más o menos cercana de la SI a la sociedad actual, y evitar así que el factor económico sea el predominante y, por ende, responsable del desfase entre unos componentes y otros de esa sociedad futura.
Pero no sólo se podrían producir agravios entre estas partes de la SI, sino que algunas ya existen si se compara la situación de España con respecto a otros países de Europa. Fue Josep María Vilá, presidente de SEDISI, el que afirmó que, aunque el sector camina correctamente, el país se encuentra todavía a la cola de Europa en cuanto a infraestructuras y consumo de datos, pero sin embargo auguró un crecimiento explosivo del comercio electrónico en los próximos años que traerá de la mano “una gran ineficiencia en la calidad del servicio, porque será humanamente imposible una adaptación paralela a la rápida evolución tecnológica, al menos hasta que se alcance una estabilidad”. Vilá también afirmó que “la innovación es el motor del cambio en las empresas españolas, porque aquellas que no rompan los esquemas clásicos, simplemente desaparecerán”.
Otro de los principales temas tratados fue el de seguridad y privacidad en Internet. En este terreno Carlos Galán, director de la Agencia de Certificación de Datos, comentó que “la certificación de datos permite al ciudadano la proximidad virtual, al incorporar los elementos requeridos de autentificación, integridad, legalidad y confidencialidad”, en referencia a la validación por Consejo de Ministros de la firma electrónica en España.
Finalmente, Astic realizó una presentación formal de propuesta de contenidos del Libro Blanco para las TIC en España. Jorge Rubio, presidente de Astic, exigió de hecho una revisión de los planteamientos de la Administración en determinadas áreas de actuación que contribuyeran a mejorar la participación de los profesionales de las TIC en su desarrollo. El certamen se completó con distintas apreciaciones sobre la innovación tecnológica en áreas como la educación, la cultura y la sanidad en la Administración (con Rafael Catalá Polo, director de personal del Ministerio de Educación y Cultura y Fernando Martín Sánchez, miembro de la Sociedad Española de Informática y Salud, como ponentes) y de la colaboración de las TIC en un mayor desarrollo e implantación del español (tema sobre el que habló Andrés Elhazar Molina, director del Centro Virtual Cervantes).
